Hidratos de carbono legumbres, lentejas, guisantes, judías, habichuelas, garbanzos, habas, altramuces, soja, cacahuetes, todas son ricas en aminoácidos esenciales aunque tienen un déficit aminoácidos sulfurados, cisteína y metionina, esta carencia se compensa perfectamente combinándolas adecuadamente con los cereales, el 30% restante se compone de azucares de las mismas características que los cereales, algunas legumbres contienen un alto índice de trisacáridos, un ejemplo seria la rafinosa formada por glucosa, fructosa y galactosa tres azucares simples, los trisacáridos no son digeribles por enzimas humanos pero si pueden ser fermentados por microorganismos de la flora intestinal justificando los gases y digestiones pesadas que conllevan algunas legumbres, aunque no toda la culpa la tiene el pobre trisacárido hay que tener en cuenta y mucho la forma culinaria con la que se elabora la legumbre, si el guiso tiene grasas y proteínas también contribuye a una digestión pesada, el contenido en fibra favorece el tránsito intestinal, baja las tasas de colesterol sobre todo la fibra de las lentejas, guisantes o judías, las legumbres tienen un índice glucémico bajo con lo cual son aconsejables para los diabéticos, repitiendo que deben ser cocinadas adecuadamente, aportan vitaminas del grupo B y minerales como magnesio, potasio y hierro.
Lo aconsejable es comer de todo y lo más variado posible así garantizas no tener carencias de nutrientes, las formas culinarias tienen que ser simples evitando las grasa, frituras o guisotes, simplemente cocidas lo ideal, acompañadas de verduras, atún natural, pollo o pescado, como hemos dicho anteriormente hay alimentos que aportan energía y otros la secuestran, lo confirma la modorra o somnolencia que nos entra después de tomar una comida copiosa, las frutas, las verduras, los cereales y las legumbres cocinadas de forma simple son fuentes de energía.