Qué es el número de Avogadro? El dilema de la homeopatia, el mol es la unidad del Sistema Internacional de Unidades que permite expresar una cantidad de sustancia, se trata de la unidad que utilizan los químicos para expresar el peso de los átomos, que equivale a un número muy grande de partículas, un mol equivale al número de átomos que hay en doce gramos de carbono-12 puro, la ecuación sería la siguiente: 1 mol = 6,022045 x 10 elevado a 23 partículas y aquí es donde radica El dilema de la homeopatia y sus detractores, aclaremos varios conceptos, los medicamentos homeopaticos se elaboran con sustancias de origen vegetal, animal o mineral y su fabricación se realiza en varias etapas perfectamente delimitadas y definidas «dilución y dinamización», hoy en día el auge cada vez mayor que alcanza la homeopatía permite que grandes laboratorios multinacionales, se dediquen exclusivamente a comercializar productos homeopáticos.
Si nos atenemos al número de avogadro, a partir de la 12CH el numero de avogadro no es verificable ya es menor, este es el punto más controvertido, la finalidad no es disolver el producto sino transmitir las propiedades terapéuticas de la sustancia inicial o remedio proporcionando su «huella energética» al vehículo o excipiente, cuenta ya con sólidas comprobaciones experimentales, conocidas como la teoría de la «imagen», «memoria», «marca» o «herencia del agua», la dinamización aumenta la impregnación del diluyente, favorece el intercambio y por el movimiento mismo agrega tanto la energía como la memoria del principio activo inicial, en cambio si nos limitamos solo a diluir sin dinamizar esto no ocurre, con lo cual se deduce que a mayor calidad del producto utilizado mejor información proporciona y con cada dilución la información transmitida es diferente, a mayor numero de diluciones más potencia, la información se transforma de algo superficial a profunda e intensa, siguiendo este razonamiento, las diluciones más bajas son utilizadas en homeopatía para trastornos o síntomas en fases agudas, espontaneas que no se arrastren un tiempo prolongado , mientras que a medida que la dilución se hace más alta 15 CH o 30CH el efecto es más profundo y se utiliza para cuadros complejos o crónicos de larga evolución.
Si nos atenemos al número de avogadro, a partir de la 12CH el numero de avogadro no es verificable ya es menor, este es el punto más controvertido, la finalidad no es disolver el producto sino transmitir las propiedades terapéuticas de la sustancia inicial o remedio proporcionando su «huella energética» al vehículo o excipiente, cuenta ya con sólidas comprobaciones experimentales, conocidas como la teoría de la «imagen», «memoria», «marca» o «herencia del agua», la dinamización aumenta la impregnación del diluyente, favorece el intercambio y por el movimiento mismo agrega tanto la energía como la memoria del principio activo inicial, en cambio si nos limitamos solo a diluir sin dinamizar esto no ocurre, con lo cual se deduce que a mayor calidad del producto utilizado mejor información proporciona y con cada dilución la información transmitida es diferente, a mayor numero de diluciones más potencia, la información se transforma de algo superficial a profunda e intensa, siguiendo este razonamiento, las diluciones más bajas son utilizadas en homeopatía para trastornos o síntomas en fases agudas, espontaneas que no se arrastren un tiempo prolongado , mientras que a medida que la dilución se hace más alta 15 CH o 30CH el efecto es más profundo y se utiliza para cuadros complejos o crónicos de larga evolución.
«Similia similibus curantur» «Lo mismo que a provocado el mal, lo cura» (Hipócrates)