Primeros contactos: siglos XVIII y XIX
Aunque existen menciones esporádicas anteriores, fue en el siglo XVIII cuando la acupuntura comenzó a practicarse en algunos países de Europa. Ya en el siglo XIX, algunos terapeutas occidentales intentaron adaptar sus principios. Un caso singular es el del naturópata alemán Carl Baunscheidt, quien desarrolló una técnica denominada “punción de curación”, inspirada en la acupuntura china. Baunscheidt repertorizó zonas de reflejo, vinculando el tejido superficial con órganos internos: por ejemplo, sugería que la tiroides podía tratarse desde la séptima vértebra cervical, o que ciertas debilidades pélvicas podían abordarse a partir de la quinta vértebra lumbar. Estas adaptaciones tempranas, aunque distantes de la acupuntura tradicional en su rigor, muestran el interés creciente que despertaba esta medicina ancestral en Occidente.La expansión en el siglo XX
El verdadero impulso llegó en la segunda mitad del siglo XX. La década de 1970 marcó un punto de inflexión: la acupuntura comenzó a introducirse en países como España, Estados Unidos, Canadá e Inglaterra, mientras que en Francia y Alemania ya se venía practicando desde hacía unos quince años. En 1979, la Organización Mundial de la Salud (OMS) reconoció oficialmente los efectos positivos de la acupuntura en una serie de enfermedades, respaldando su uso en indicaciones concretas. Este reconocimiento impulsó su aceptación y su incorporación progresiva como opción terapéutica complementaria, especialmente en el manejo del dolor y de trastornos de origen nervioso.Consolidación académica y científica
En las décadas de 1990 y 2000, la acupuntura dio nuevos pasos hacia su validación científica. En 1998, un consenso nacional publicado en el Journal of the American Medical Association subrayó que la acupuntura podía resultar tan efectiva como beneficiosa en el tratamiento de ciertas dolencias. Un año después, en 1999, México abrió el primer posgrado universitario de especialización en Acupuntura y Fitoterapia en la Universidad Autónoma Metropolitana. Más tarde, en 2010, el Instituto Politécnico Nacional aprobó el posgrado en Acupuntura Humana, avalado por el Centro de Investigación y de Estudios Avanzados (CINVESTAV). En paralelo, se desarrollaron experiencias pioneras en el ámbito hospitalario. En 2007, en Chile, el neurólogo Alex Flores impulsó los primeros servicios de acupuntura en hospitales públicos (Hospitales de Carabineros, Militar y Dipreca), colaborando con los equipos de salud oficiales. En 2008, el Ministerio de Salud de Chile reconoció y reguló oficialmente el ejercicio de la acupuntura en el país.Avances recientes (2010–2025): integración y evidencia científica
En los últimos 15 años, la investigación científica sobre la acupuntura ha avanzado notablemente. Un equipo de la University of Maryland School of Medicine demostró que la acupuntura puede reducir significativamente el dolor y mejorar la función motora en pacientes con osteoartritis de rodilla, como publicó el Annals of Internal Medicine. Según el Dr. Brian Berman, la combinación de acupuntura con tratamientos convencionales mejoró notablemente la calidad de vida de los pacientes. Asimismo, estudios revisados en el BMJ (British Medical Journal) han evidenciado su eficacia en el tratamiento del dolor lumbar, las náuseas en el embarazo y diversos tipos de dolor crónico. Metaanálisis recientes —incluyendo revisiones Cochrane— han reforzado el nivel de evidencia para el uso de acupuntura en ciertas indicaciones clínicas. Además, en muchos países europeos (incluyendo España), la acupuntura ha ido integrándose en unidades hospitalarias de tratamiento del dolor y en servicios de medicina integrativa. Diversas sociedades médicas internacionales ya incluyen la acupuntura en sus guías clínicas para el manejo del dolor crónico, migrañas, ansiedad, insomnio y trastornos funcionales.Situación actual en Occidente
Hoy en día, la acupuntura en Occidente se sitúa como una terapia complementaria reconocida en numerosos contextos sanitarios. En España, aunque su marco regulatorio aún presenta desafíos, la acupuntura es practicada por profesionales de la salud en múltiples entornos. Universidades y escuelas acreditadas ofrecen formación de posgrado, y la demanda por parte de la población continúa creciendo. Por su parte, en países como Estados Unidos, Alemania, Suiza o el Reino Unido, la acupuntura se encuentra ya plenamente integrada en programas de medicina integrativa en hospitales y clínicas. Los avances científicos continúan profundizando en los mecanismos neurobiológicos que explican sus efectos, uniendo así el saber tradicional con la investigación moderna. Este largo recorrido es testimonio de un diálogo fecundo entre culturas médicas diversas. Lejos de ser una moda pasajera, la acupuntura ha conquistado su lugar como herramienta terapéutica seria, útil y complementaria en la medicina del siglo XXI.🎬 Medicina Tradicional China – Historia, fundamentos y aplicación actual.
✍️ ¿Quién no recuerda la “crisis periférica” (2010–2016)? No fue la primera que llevaba a cuestas, pero sí una de las más duras: marcó prácticamente la desaparición de la clase media. Pasé de no tener tiempo a tener todo el del mundo. Sabía, como en otras ocasiones, que era cuestión de tiempo. Mi experiencia profesional me daba esa serenidad.
Aproveché ese periodo para transcribir artículos que había escrito años atrás con mi vieja Olivetti, los fotocopiaba en la copistería del barrio y los dejaba en la sala de espera, para quien quisiera leerlos o llevárselos.
A finales de 2012 empecé a publicarlos en mi blog. Hoy los recupero con respeto, como testimonio de una época y de un camino recorrido, revisados y actualizados 2025 en la categoría “Mis primeros artículos”.