Mesa de playa con ensalada y alimentos saludables frente al mar, en un ambiente familiar con personas disfrutando del sol y el baño
Las dietas proteicas se han popularizado como método rápido para perder peso, pero no están exentas de riesgos. Aunque pueden ofrecer resultados visibles a corto plazo, su uso prolongado o sin supervisión puede comprometer la salud metabólica, renal y cerebral. Qué son, cómo funcionan y por qué es importante conocer las dietas proteicas beneficios riesgos y errores comunes que debes evitar.

Un motor mal alimentado

Corría el año en que un Seat 1500 podía ser un sueño cumplido. Trabajando en el taller del señor Andrés, descubrí que, como todo en esta vida, lo barato puede salir caro. Aquel coche a diésel fue mi escuela. Al ponerle gasóleo B en lugar del A, el motor acabó reventando por dentro. Inyectores, filtros, carburador… todo dañado por una decisión errónea que, en principio, parecía no tener consecuencias.

Lo entendí entonces y lo confirmo ahora como profesional: el cuerpo, como un motor, necesita el combustible adecuado. No se puede forzar sin consecuencias.

Ilustración del efecto rebote en adolescentes tras dieta proteica con un yo-yo como metáfora
El peso baja… pero también vuelve a subir. Las dietas restrictivas mal gestionadas suelen acabar en efecto rebote.

¿Qué es una dieta proteica?

Una dieta proteica es aquella que aumenta el consumo de proteínas de forma desproporcionada, reduciendo drásticamente carbohidratos como pan, pasta, arroz, fruta o legumbres. El objetivo suele ser perder peso rápidamente o ganar masa muscular. Pero ese desequilibrio energético tiene un precio.

“Las dietas proteicas son bajas en carbohidratos y altas en proteínas, lo que obliga al cuerpo a usar las grasas como fuente principal de energía”.

¿Cómo actúa en el organismo?

  • Una dieta proteica obliga al cuerpo a buscar energía donde puede. Al reducirse drásticamente los hidratos de carbono, comienza un proceso de adaptación metabólica que no siempre sigue el mismo ritmo en todas las personas.
  • En teoría, tras las primeras 24 horas el cuerpo agota las reservas de glucógeno hepático y muscular.
  • A partir de las 48 horas, debería empezar a producir cuerpos cetónicos (cetosis) a partir de las grasas, como fuente alternativa de energía para el cerebro y otros órganos.
  • Sin embargo, esto no siempre ocurre tan rápido ni de forma tan evidente.
  • Muchos pacientes, especialmente aquellos con niveles elevados de triglicéridos o con hígado graso, tienen dificultades para entrar en cetosis real. ¿Por qué?
  • Porque los triglicéridos —la grasa del tejido adiposo, los músculos y el hígado— están compuestos no solo por grasas saturadas, sino también por azúcares simples y alcohol. Son reservas de energía más difíciles de movilizar.
  • Esto ralentiza el cambio metabólico: el cuerpo no entra en cetosis con facilidad y sigue dependiendo parcialmente de otras vías menos eficientes.
  • Como consecuencia, no aparecen los síntomas típicos de cetosis como el mal aliento (halitosis), orinas con olor fuerte o el típico mareo del segundo al tercer día.
Algunos incluso piensan que “la dieta no funciona”… pero lo que sucede es que su cuerpo aún no ha hecho la transición metabólica.

“Aunque puede parecer efectivo, es un estrés metabólico que no todas las personas pueden sostener”.

¿Qué partes del cuerpo sufren más?

  • El cerebro, que depende en parte de la glucosa (no solo de cetonas).
  • El riñón, que debe eliminar residuos del exceso de proteína.
  • El hígado, que metaboliza aminoácidos y puede verse sobrecargado.
  • Los huesos y músculos, afectados por la acidez y la pérdida de calcio.
“La sensación de euforia que produce la cetosis es breve. El verdadero problema aparece al volver a la alimentación normal: el temido efecto rebote”.

¿Cuándo puede ser útil una dieta proteica?

En fases iniciales de un tratamiento de pérdida de peso, bajo supervisión médica o de un nutricionista, puede emplearse como recurso puntual y controlado. Pero siempre deben ajustarse:

  • Cantidades de proteínas.
  • Estado de salud general.
  • Nivel de actividad física.
  • Función renal y hepática.
Nunca debe aplicarse de forma genérica o con libros de “la dieta de moda”.

Errores comunes

  • Pensar que “si bajo rápido, mejor”.
  • Usar solo proteína animal sin valorar el equilibrio ácido-base.
  • Ignorar síntomas como estreñimiento, fatiga o malestar.
  • Saltarse frutas, verduras o legumbres creyendo que “engordan”.
  • No planificar la transición de pérdida de peso al mantenimiento.

¿Qué alimentos son ricos en proteínas?

  • Carnes magras
  • Pescado
  • Huevos
  • Lácteos
  • Legumbres
“En las dietas desequilibradas, predominan las carnes y huevos, dejando de lado vegetales y cereales integrales, lo cual es un error”.

Personalización, la única vía segura

Cada cuerpo responde de forma distinta. Hay quien tolera mejor ciertos azúcares, otros metabolizan peor algunas proteínas. La única dieta válida es aquella personalizada, que no excluya grupos esenciales ni genere desequilibrios.

“No es la fruta o la leche lo que engorda. Son los empachos, las cantidades y los malos hábitos.”

Conclusión: perder peso ganando salud

La clave está en diseñar una estrategia sostenible: sin estrés metabólico, sin carencias, sin culpabilización.
Que el peso se pierda con criterio y el cuerpo esté bien alimentado.
Que la pérdida sea salud, no enfermedad.

✍️ ¿Quién no recuerda la “crisis periférica” (2010–2016)? No fue la primera que llevaba a cuestas, pero sí una de las más duras: marcó prácticamente la desaparición de la clase media. Pasé de no tener tiempo a tener todo el del mundo. Sabía, como en otras ocasiones, que era cuestión de tiempo. Mi experiencia profesional me daba esa serenidad.
Aproveché ese periodo para transcribir artículos que había escrito años atrás con mi vieja Olivetti, los fotocopiaba en la copistería del barrio y los dejaba en la sala de espera, para quien quisiera leerlos o llevárselos.
A finales de 2012 empecé a publicarlos en mi blog. Hoy los recupero con respeto, como testimonio de una época y de un camino recorrido, revisados y actualizados 2025 en la categoría “Mis primeros artículos”.

Por Mariano Rodríguez Pastor

M. Rodríguez Dietética Acupuntura es una Web de terapias complementarias, consejos e información, Acupuntura MTC, Auriculopuntura, Naturopatía, Homeopatía, Dietética y Nutrición.